Inés Sagrario es la CEO y co-fundadora de Ekonoke. Es economista de formación y ha dedicado la mayor parte de su carrera profesional en el mundo del desarrollo sostenible, habiendo vivido en un total de 10 países y trabajado en más de 25. Sueña con cambiar la forma en la que nos alimentamos y para ello ha fundado Ekonoke.
Ekonoke nace para reinventar la cadena alimentaria, para redefinir cómo funcionan los sistemas de aprovisionamiento, empezando por las lechugas, hojas verdes, microgreens y aromáticas. Es una startup con una fuerte orientación al desarrollo de conocimiento puntero en el cultivo en entorno controlado. Actualmente ofrecemos todos los productos que cultivamos en lo que llamamos «minihuertas», que permiten que sigan vivas en el punto de consumo hasta el instante que se vayan a cosechar. Sin pesticidas ni plásticos de un solo uso, pero con muchísimo sabor y todos sus nutrientes. Nuestro departamento de I+D trabaja intensamente en el desarrollo de otros cultivos en entorno controlado, sobre todo para productos que tienen alto riesgo climático. Nuestro modelo de negocio es crecer al replicar nuestra sala de cultivo en otras ciudades, para producir siempre alimentos locales, sin huella de carbono y una escasa huella del agua. En el futuro que soñamos dejarán de viajar los alimentos y viajará solo el conocimiento para cultivarlos de forma sostenible en cada lugar.
Inés Sagrario es la CEO y co-fundadora de Ekonoke. Es economista de formación y ha dedicado la mayor parte de su carrera profesional en el mundo del desarrollo sostenible, habiendo vivido en un total de 10 países y trabajado en más de 25. Sueña con cambiar la forma en la que nos alimentamos y para ello ha fundado Ekonoke.
Ekonoke nace para reinventar la cadena alimentaria, para redefinir cómo funcionan los sistemas de aprovisionamiento, empezando por las lechugas, hojas verdes, microgreens y aromáticas. Es una startup con una fuerte orientación al desarrollo de conocimiento puntero en el cultivo en entorno controlado. Actualmente ofrecemos todos los productos que cultivamos en lo que llamamos «minihuertas», que permiten que sigan vivas en el punto de consumo hasta el instante que se vayan a cosechar. Sin pesticidas ni plásticos de un solo uso, pero con muchísimo sabor y todos sus nutrientes. Nuestro departamento de I+D trabaja intensamente en el desarrollo de otros cultivos en entorno controlado, sobre todo para productos que tienen alto riesgo climático. Nuestro modelo de negocio es crecer al replicar nuestra sala de cultivo en otras ciudades, para producir siempre alimentos locales, sin huella de carbono y una escasa huella del agua. En el futuro que soñamos dejarán de viajar los alimentos y viajará solo el conocimiento para cultivarlos de forma sostenible en cada lugar.